domingo, 26 de junio de 2011

Si yo pudiera sanar el dolor, si Dios me permitiera curar tus heridas. Si tan sólo Dios respondiera todas mis preguntas, si resolviera mis dudas, y dejara la confusión atrás.
Dios, te hago dos preguntas: ¿Qué hace que nuestro corazón elija una persona en millones? ¿Qué hace que podamos sacar una persona de nuestra vida y de nuestro corazón?.
Todos los días pienso en las respuestas posibles, pero no las encuentro. Pienso en las señales que me puedes enviar y cómo puedo saber cuáles son esas señales. Quisiera saber ¿cómo hago para saber cuál es el amor de mi vida? ¿Con quién estaré el resto de mis días? ¿Quién estará allí al lado mío cuando mis ojos ya no brillen?

Dios, sólo te pido que si me permites vivir, dame las soluciones a mis interrogantes, ayúdame a saberlo por favor.

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